Inestable cápsula del tiempo
Jessica Sequeira
2 September 2013
http://www.thetgpost.com/index.php/general-491/sociedad/21586-inestable-capsula-del-tiempo

Si trataras de recordar lo que sucedió en el país esta semana, seguramente podrías. Si trataras de pensar lo que pasó el año pasado podrías también aunque a un nivel menos detallado. Pero si trataras de pensar en los eventos sobre la tierra cien o mil años atrás, podrías, pero los verías con una nitidez menos precisa. Así de espaldas contra el olvido, la memoria individual y colectiva trabajan para reconstruir eventos originalmente muy apartados en el tiempo y distintos en significado. De esta manera tiempo y significado se pliegan sobre sí mismos al igual que un abanico chino.
Funciona del mismo modo con el espacio. Visto desde el futuro, quizás, los objetos hoy para nosotros muy distintos –como un manual del idioma mapuche, unas muñecas de plástico, las luces de neón sobre la avenida– serán interpretados entre sí mediante una relación artificial y determinada por una época específica. ¿Qué quedará entonces de la diferencia entre lo ‘indígena’ y lo ‘urbano’, por ejemplo, cuando ambos se hayan convertidos, en el pasado de los principios del siglo XXI?
La exposición actual del Palais de Glace, ‘De la misma matriz’ –una retrospectiva de los últimos treinta años de las obras de la artista conceptual Anahí Cáceres– juega con todos estos temas. Esta selección representativa retoma el hilo de las obras de Cáceres: pensar en lo contemporáneo como si fuera visto desde el futuro. Las obras no parecen tener mucha producción; su poder reside en las ideas que se tratan y transmiten. Es un efecto maravilloso ver los trabajos de Cáceres expuestos juntos, en forma ‘retrospectiva’, como en realidad no pueden ser vistos de otra manera.
Una pared del salón, que se llama ‘Arqueología del tercer milenio’, se dedica a objetos con valor histórico como por ejemplo el papiro. El efecto es ‘llamar la atención sobre un mundo conocido para nosotros, que está desapareciendo a una velocidad gigantesca, en un proceso difícil de entender’. Su mezcla de técnicas antiguas y técnicas contemporáneas, que cada vez se usan menos, plantea la idea de ‘la construcción de un futuro del cual aún, somos su arqueología’. Cerca, en otra pared, hay una exposición de objetos diversos que interactúan o existen inquietantemente juntos. En otras todavía, la técnica mixta –garabateos de lápiz, de papel, de pintura y de xilografía– se transforma en una manera de preservar la memoria de sus propias técnicas.
Atraviesan la caja de resonancia del museo varios sonidos de distintas obras. En el silencio del museo, ecos sagrados se mezclan con las notas de una guitarra eléctrica y con las voces de unos niños. Cada sonido, vivo en la realidad, acá es como embalsamado y unidireccional. Cáceres se preocupa mucho por la comunicación (o la falta de la misma) e imagina un futuro que logra técnicamente armar una red a través del Internet que sin embargo no está conectada a un nivel esencial. En el salón los sonidos se cruzan, pero no se hablan. Asimismo las obras de Cáceres suponen un cambio en la personalidad de los humanos del futuro, una perdida de la inocencia aunque no de la humanidad: ‘En un entorno que no vemos, vivimos más cerca de nuestra propia basura, de la crueldad y la injusticia, aún así, la belleza está a nuestro alcance.’
Esta exposición es un aprendizaje extraño de como ver. Quizás, volviendo para casa después en subte, pensarás en el espacio resonante de alguna manera parecida a la del salón, un espacio que recurre a una mezcla de técnicas en la cual una pintura verde está salpicada sobre los azulejos de la pared, y una mixtura de voces coexiste con el sonido de un acorde tocado una y otra vez. Quizás los frenos de emergencia del tren comenzarán a asemejarse con las antiguas jarras de mermelada que usaba una abuela, el pasado surgiendo para encontrarse con el presente, todo ya moviéndose hacia adelante. Quizás aún empezarás a ver el mundo actual como un bricolaje o un patio de recreo, completamente abierto a las lecturas de los arqueólogos y artistas del futuro.